Analogia de la Hormiga
el que permanece en mí, y Yo en él,
éste lleva mucho fruto;
porque separados de mí nada podéis hacer.
Juan 15:5
En Africa, hay montañas construidas por hormigas. En toda colonia de hormigas hay una hormiga madre o reina, la cual vive en una de las montañas.
La reina nunca sale de su hormiguero, y está ocupando una de las secciones adentro de él más seguras.
Las hormigas son bien organizadas, y al igual como en nuestros ejércitos hay rangos como, capitán, coronel, soldado etc, ellas también tienes esos rangos.
Las hormigas son bien organizadas, y al igual como en nuestros ejércitos hay rangos como, capitán, coronel, soldado etc, ellas también tienes esos rangos.
La hormiga reina, vive protegida por hormigas soldados que no permiten que nada extraño se acerque a su reina.
Si en algún momento la hormiga reina esta siendo amenazada por algo o está en peligro, ésta manda un mensaje a las hormigas que están afuera buscando alimento, tienen como una especie de radar que hace que las hormigas obreras reciban un mensaje.
Si por alguna razón la hormiga reina muere, las hormigas que están afuera, en este caso las obreras, no pueden regresar al hormiguero, ellas pierden toda conexión, quedando desconectadas, desubicadas, desorientadas, una vez que la hormiga reina muere, las hormigas obreras son incapaces de encontrar el camino a casa y hasta mueren.
Esto es muy parecido a lo que sucede con las ovejas, si el pastor no está, las ovejas pierden el control y la orientación, quedando a merced de cualquier depredador.
Esta analogía muy interesante, nos lleva a ver nuestra propia vida y las palabras de Jesús en Juan 15:5. Es lo que hemos estado viviendo por siglos, separados de Cristo; estamos desubicados, desorientados, hemos perdido el contacto con nuestro Rey, ya no es nuestro centro, hasta que somos llamados de nuevo y volvemos a Él, entonces recuperamos el camino.
Cuando el Pastor regresa a llamar a sus ovejas, éstas reconocen Su voz, y saben quién es.
Reconocen que es el Pastor, el Rey, el que las alimenta, las cuida, las protege.
Lecy Villaparedes
al servicio y la voluntad de mi Señor
Reconocen que es el Pastor, el Rey, el que las alimenta, las cuida, las protege.
Lecy Villaparedes
al servicio y la voluntad de mi Señor
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