Como ladrón en la noche

Así clama mi alma la sed que tengo por ti.

El Salmo 42 es maravillos, porque llena el alma y se rebosa el Espíritu Santo de DIOS.

Mi testimonio es la repsuesta de DIOS, cumplida en mi, y uso este Salmo, para 

decirle a DIOS como estoy por El y lo que quiero.

Veo la obra de DIOS frente a mi, y me gozo en su magnificencia.

Salta mi corazón de emoción, 

siento tu Espíritu dentro de mi gozandoce en tus obras.

Así clama por ti, oh DIOS el alma mía . Señor tu sabes  mi necesidad, 

tu conoces el deseo de mi corazón .

Derrama más y más de tu Espíritu sobre mi, 

porque yo tengo sed de ti.

Cuando se abate mi alma y se aflige mi corazón, 

 fueron mis lagrimas de día y de noche, 

 has mandado tu misericordia. 

Tú mi DIOS me has llenado de paciencia 

y me has devuelto el gozo de tu palabra. 

Me has vestido con sedas, mientras espero por ti,

  has cobijado mi alma bajo tu sombra, 

tú me has dado la paz que no da el mundo. 

Solo en ti confío, Oh DIOS, Mi Señor; 

En ti esperaré , porque en ti creo, 

porque tuya es la misericordia que hay en tus obras. 

Tu promesa es luz a mi vida, que ilumina cada paso que doy.

Esta vida que me diste y que  no 

me alcanza para vivirla a tus pies.

Entonces, por que te abates alma mía? 

sentémonos bajo la sombra del árbol , 

espera en DIOS, alma mía porque aun he de alabarle.

Amén Amén.

                                                                                   Lecy Villaparedes